"Admitimos ante
Dios . . . "
Con tal que trates de no esconder nada, tu sensación de alivio
aumentará minuto a minuto. Esas emociones represadas durante tantos
años rompen su confinamiento y milagrosamente se desvanecen en cuanto
están expuestas. Al disminuir el dolor, una saludable tranquilidad va
a tomar su lugar. Y cuando se combinan la humildad y la serenidad,
puede ocurrirnos algo que es de gran significación para nosotros.
Muchos de los A.A. que fueron agnósticos o ateos, nos dicen que fue
durante esta época del Paso Cinco cuando empezaron a sentir realmente
la presencia de Dios. Y aun aquellos que ya tenían fe llegaron a
adquirir una conciencia de Dios como nunca la habían sentido antes.
DOCE Y DOCE, pág. 66
Rondando la recaída
-
Como en la adicción, en la *coadicción* la recaída siempre es un riesgo. Y
creedme, es una experiencia desagradable, porque pone en evidencia tu
recupera...
Hace 9 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario