UN DON INAPRECIABLE
Para esta etapa, según toda probabilidad, hemos alcanzado hasta cierto
punto la liberación de nuestras desventajas más arrolladoras.
Disfrutamos de momentos en los cuales hay algo parecido a la verdadera
tranquilidad de espíritu. Para aquellos de nosotros que hasta ahora
sólo hemos conocido la excitación, depresión o ansiedad (en otras
palabras, todos nosotros), esta paz recién encontrada resulta un don
inapreciable.
DOCE PASOS Y DOCE TRADICIONES, p. 79
Estoy aprendiendo a "desprenderme" y "dejarlo en manos de Dios", a
tener una mente abierta y un corazón dispuesto a recibir la gracia de
Dios en todos mis asuntos; de esta manera puedo experimentar la paz y
libertad que vienen como resultado de la entrega. Se ha demostrado que
un acto de entrega, que se origina en la desesperación y en la
derrota, puede convertirse en un continuo acto de fe, y que la fe
significa libertad y victoria.
Rondando la recaída
-
Como en la adicción, en la *coadicción* la recaída siempre es un riesgo. Y
creedme, es una experiencia desagradable, porque pone en evidencia tu
recupera...
Hace 9 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario